Pequeñas labores

De Rivka Galchen

Pienso que esta afición por leer como las escritoras habitan sus maternidades es también una forma de llegar a los feminismos.

Como dice la pensadora Vanessa Rosales, escribir y ser mujer es un acto de insurrección porque se nos impuso el silencio y la invisibilidad en la historia del pensamiento. -Es un acto profundamente revolucionario que NOS escribamos-.

También creo que es revelarnos contra la idea misógina de que hay ‘temas de mujeres’, que son de segunda categoría dentro del canon literario. 

Por eso cada vez que tengo delante de mí un libro como Pequeñas labores de Rivka Galchen, que convierte en agudas reflexiones su mirada intensa sobre maternar, me siento un poco más rebelde y un poco más feminista.