Iceberg de Soledad Castresana
En el círculo de lectura iniciamos el año leyendo poesía. No soy lectora de poesía. Para mi pesar. Sin embargo, hay cierta poesía de lo cotidiano y confesional, que se me hace cercana y me atrapa. Esto nos pasó a todas las que leímos Iceberg de Soledad Castresana.
En el colectivo tuvimos el privilegio de conversar con la autora. Hablamos sobre el proceso de concretar este libro, sobre cómo la maternidad incide en su escritura, la conciliación imposible entre escribir y cuidar, “el tiempo madre”, sobre cómo han emergido las maternidades reales en la literatura contemporánea y la imagen de una madre que desafía las representaciones idealizadas, así como otros temas relacionados a la experiencia de lectura de cada una con sus poemas.
Iceberg es un poemario íntimo, hermoso, duro sobre tópicos que nos atraviesan: el paso del tiempo, la maternidad, los mandatos sociales, los vínculos familiares, sus complejidades, la escritura.
La línea paterna
Una mujer, un hombre
y su padre
se muestran fotos
de sus partes malas,
sus partes rotas,
y las costuras.
Comparten. Compiten.
Cada cual, su monstruo propio.
Además la publicación del libro de Ediciones Encino que tengo, acompaña los poemas con ilustraciones hermosas de la artista Alejandra Montero, que le agregan otra capa de lectura.

